domingo, 15 de agosto de 2010

El verbo con barba

Hace muy pocos días recordábamos la navidad, y una de las expresiones a las que mas acudimos al hacerlo es "Emanuel" (Dios con Nosotros). Este es, dentro de los nombres que Jesús tiene, el que mejor expresa la grandeza de su obra: hacerse hombre y estar entre nosotros, como uno mas, tal como cuenta el evangelio de Juan en su primer capítulo.
Suelo ponerme en el lugar de José y Maria, dos padres inexpertos que le enseñaron las palabras al que con su voz creo todo lo que existe, le dieron consejos al que tiene el pasado, presente y futuro como una realidad simultanea, ayudarona dar los primreros pasos al que tiene el universo como estrado de sus pies, o darle de comer para que tenga fuerza el que es todopoderoso. Quiero que veas estas cosas para que te des cuenta de que Dios se hizo hombre.
Filipenses 2 amplia la renuncia de Jesús a su estado gloriosopara hacerse hombre. Lo hizo tan bien, se hizo tan humano, que cuando Judas lo entregó tuvo que señalarlo a sus entregadores con un beso para que lo distingan. Es increible, ¡Dios era tan hombre!

Piensa bien que haras. Si el mismisimo Dios se humillo volviendose hombre, nosotros que somos simples mortales ¿hasta donde hemos de humillarnos por causa del evangelio?

Boris Mazalyka. Pastor

No hay comentarios.:

Publicar un comentario